Las Cuevas de Artá no son cualquier cueva. Están en lo alto de un acantilado, mirando al Mediterráneo desde Canyamel. Entrar allí no es solo caminar por pasillos de piedra, es adentrarse en la historia natural de la isla. Si te interesan los paisajes que parecen de otro planeta, la visita a las cuevas de Artá te va a dejar con la boca abierta. Nuestros tours a las cuevas de Artá recorren salas enormes, columnas de piedra que parecen templos antiguos y galerías con nombres que lo dicen todo: el Infierno, la Reina de las Columnas, el Salón de las Mil Columnas…
Durante tu visita a las cuevas de Artá te contamos historias sobre piratas que usaban la cueva como escondite, sobre reinas que mandaron construir escalinatas hasta la entrada, y sobre los espeleólogos que se metieron allí por primera vez con una linterna de aceite. ¿Quieres verlo con tus propios ojos? Nuestros guías conocen cada rincón de estas cavidades. Las cuevas mantienen una temperatura fresca todo el año, así que no importa si vienes en agosto o en diciembre. Ponte calzado cómodo y déjate llevar por una de las cuevas más impresionantes de Europa.
Ya sea tu primera vez o la décima, una excursión a las cuevas de Artá siempre sorprende. Hay algo especial en caminar bajo tierra mientras afuera brilla el sol. La siguiente sala te espera, y nadie puede decir exactamente qué forma tendrá la próxima estalactita.